
Los trabajos de rescate no van a parar. Los servicios de salvamento turcos seguirán trabajando durante la noche para intentar rescatar a heridos y desaparecidos que han dejado los seísmos.
En la madrugada del lunes, un terremoto de magnitud 7,8 en la escala de Richter sacudió el sureste de Turquía y el norte de Siria. Nueve horas después, un segundo temblor de 7,6 se ha registrado en el centro de Turquía, un país situado en una de las zonas sísmicas más activas del mundo. Los temblores, seguidos de decenas de réplicas, dejan ya más de 2.600 muertos, 13.000 de heridos y un número aún por estimar de desaparecidos. En Turquía hay al menos 1.651 fallecidos y 11.119 heridos, según las autoridades, que cuantifican también 2.834 edificios derrumbados.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha asegurado que su país vive “la mayor tragedia” desde el gran terremoto de Erzincan en 1939, que dejó 30.000 fallecidos, y advierte de que la cifra de víctimas puede ser aún mayor. En Siria se han registrado más de 570 muertos en zonas controladas por el Gobierno y otros 430 en la zona del noroeste controlada por los rebeldes, donde han colapsado más de 400 edificios.
El fuerte terremoto de magnitud 7,7 que sacudió a Turquía y Siria ha dejado de momento más de 2.500 muertos en ambas naciones.
Erdogan, declaró que unos 45 países han ofrecido ayuda después del devastador terremoto y las fuertes réplicas que aún continúan.
“Es el sismo más fuerte desde el terremoto de Erzincan de 1939. Según las últimas evaluaciones es de 7,7. Hay graves daños también en las zonas vecinas de Siria”, dijo el mandatario turco, al confirmar que se han registrado derrumbes o daños graves en más de 2.800 viviendas y que se ha rescatado con vida a 2.470 personas de los escombros.
“Debido a que continúan las labores de desescombro en muchos edificios de la zona del terremoto, no sabemos a cuánto ascenderá el número de muertos y heridos”, declaró Erdogan.
Las bajas temperaturas y la nieve en la zona, donde también hay territorios montañosos de difícil acceso, complican las tareas de rescate.
La potencia del terremoto
El castillo Gaziantep, reconocido por su valor histórico y turístico, terminó en escombros. “Las rejas de hierro alrededor del castillo estaban esparcidas en las aceras circundantes. El muro de contención junto al castillo también se derrumbó. En algunos baluartes se observaron grandes grietas”, informó la agencia local ‘Anadolu’.