La baja profundidad en este tramo final del río Magdalena en el Puerto de Barranquilla persiste manteniendo un bajísimo calado inferior a 7. 5 metros lo que impide el tránsito de grandes embarcaciones cargados con importante mercancía.
Tal es la crisis, que en la última semana el puerto de la capital del Atlántico ha dejado de movilizar más de 40.000 toneladas de maíz, soya, trigo, acero, material para construcción y hasta exportaciones de carbón y coque.
La situación se debe a la falta de mantenimiento en el canal de acceso, ya que el pasado 28 de diciembre terminó el contrato de dragado y el Gobierno aún no concreta el proceso para reanudar las labores de extracción de sedimentos, a pesar de que el Distrito de Barranquilla decretó la calamidad pública en la zona portuaria.
«Sabemos que después de decretada la calamidad, el Gobierno ha accedido a contratar una draga, mientras se adjudica ese otro contrato grande, pero a la fecha no tenemos noticias de cómo van a proceder ni de los tiempos que emplearán, que es lo más importante para poder informarles a los clientes y a los usuarios del puerto», manifestó Lucas Ariza, director de Asoportuaria.
Por las malas condiciones de navegación del canal de acceso a Barranquilla, el gremio portuario estima pérdidas superiores a los 3 millones de dólares por sobrecostos e ineficiencias para todo el sector importador y exportador.
Tienes que leer
Así se proyecta Barranquilla como la ciudad más inclusiva de Colombia
Barranquilla es ‘Verde de Verdad’: la ciudad ganó premio internacional de medioambiente
Recaudo de impuesto predial en Barranquilla aumentó un 27%