Mientras la Minga lo espera en Bogotá, Duque se va para Chocó

El presidente de la República, Iván Duque, se desplazó a última hora de este lunes 19 de octubre a Quibdó, capital de Chocó, donde realizó encuentros con las autoridades y población, mientras que en Bogotá, más de 8 mil indígenas esperan por él en la Plaza de Bolívar para que el gobierno escuche sus necesidades.

Aunque el presidente afirmó que el objetivo es revisar la situación de seguridad que afecta a esta zona del país, la crítica contra ese viajes exprés ha sido dura porque ha dejado la percepción de que más que un viaje programado, es un escape para no reunirse con la Minga.

“Vamos a fortalecer la presencia de fuerza pública y llegar con inversión social para evitar que sean reclutados por las bandas”, dijo Duque en las calles chocoanas.

Para la mañana de este martes se tiene programado un consejo de seguridad en el que las autoridades, además de evaluar la situación de seguridad, harán visible, según dijo el presidente, a “muchos de los criminales de estas bandas”.

El Alcalde de Quibdó, Martín E Sánchez Valencia, señaló en BluRadio que en los últimos días han aparecido en la ciudad panfletos amenazantes firmados por un grupo autodenominado “Fuerzas Armadas Mexicanas”.

Según Sánchez, el grupo está conformado por chocoanos, sin que se haya encontrado alguna influencia de carteles mexicanos. Desde que se comenzaron a presentar estas amenazas, las autoridades de esa capital enviaron cartas a Presidencia solicitando la visita de Duque.

Esta se dio ayer de forma sorpresiva. “Tenemos problemas que son de años anteriores, Quibdó lleva un promedio de 100 muertos anuales por el flagelo del microtráfico y la guerra que hay entre las bandas criminales”, dijo el funcionario.

El pasado 27 de septiembre tres personas fueron asesinadas en una zona urbana de esta ciudad, en hechos que ocurrieron, al parecer, por un “ajuste de cuentas interno” de un grupo criminal conocido como “Los palmeños”.

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