La noche del pasado domingo 1 de junio Barranquilla perdió a uno de sus más entrañables cronistas gráficos: Luis Rodríguez Lezama, conocido por todos como “Lucho”. A los 55 años, tras una prolongada enfermedad, falleció el hombre que con su lente inmortalizó la esencia de la ciudad y su gente.
Nacido y criado en Barranquilla, Lucho estudio en el Colegio Americano y su carrera profesional en la Universidad Autónoma del Caribe. Su pasión por la fotografía lo llevó a trabajar en medios como La Libertad y El Tiempo, hasta que en 2008 se unió a la redacción de El Heraldo, donde se convirtió en una figura central del fotoperiodismo regional.
Su lente capturó desde las celebraciones del Junior de Barranquilla hasta las tragedias que marcaron la historia de la región. Su mirada profunda y su capacidad para conectar con las personas frente a su cámara le ganaron el respeto y cariño de colegas y ciudadanos.
Además de su labor profesional, Lucho fue un apasionado defensor de la fotografía como herramienta de memoria histórica. Su archivo personal es un testimonio invaluable de la evolución de Barranquilla y sus gentes a lo largo de las décadas.
En su memoria, colegas y amigos han expresado su pesar y han rendido homenaje a su trayectoria, destacando su compromiso con la verdad y su pasión por el periodismo. Luis Rodríguez Lezama, el reportero gráfico de Barranquilla, ha partido, pero su legado perdurará en cada imagen que dejó atrás.
El lugar y hora de los actos fúnebres serán anunciados en las próximas horas por su familia.
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