10 de octubre de 2024

En Barranquilla se vende más de una casa cada hora

9.784 viviendas se vendieron en la capital del Atlántico durante 2021, alcanzando cifras históricas a nivel nacional. Efecto de la confianza en la gestión pública y privada de la ciudad.

El mercado inmobiliario sigue jalonando la economía local. Este sector alcanzó niveles de ventas históricas en el país, impulsado por la política nacional de subsidios de vivienda.

De acuerdo con el Informe del Mercado Inmobiliario de Barranquilla, realizado por la Secretaría de Planeación, para 2021 se vendieron 9.784 unidades de vivienda, distribuidas en 147 proyectos. De esta manera, y conforme a los datos de Camacol, se estima que en la capital del Atlántico se venden 1,13 casas cada hora.

Dentro de los objetivos del alcalde Jaime Pumarejo está convertir a Barranquilla en una ciudad de propietarios. Para tal fin se está desarrollando la figura de los planes parciales. Durante 2021 se lanzaron 34 proyectos de vivienda, 18 de ellos ubicados en los planes parciales.

El secretario distrital de Planeación, Juan Manuel Alvarado, explica que un plan parcial es el instrumento más importante para ejecutar el Plan de Ordenamiento Territorial (POT) y desarrollar adecuadamente el territorio, dado que concentran la articulación entre la planeación y la gestión del suelo. “De esta manera garantizamos un crecimiento organizado de la ciudad. La norma urbana ha permitido el comportamiento de ventas VIS. Vemos que más personas acceden a los tipos de vivienda subsidiada y al programa de Mi Casa Ya”.

En cuanto a la dinámica del sector, se han incrementado las solicitudes de licencias de construcción, que son las autorizaciones requeridas para la realización de cualquier tipo de construcción. En Barranquilla el principal uso de las construcciones corresponde a vivienda con un 85 % del total de aprobaciones, seguido de la asignación de licencias para construir bodegas y comercio, con un 9 % y 3,8 % respectivamente.

El Informe del Mercado Inmobiliario muestra la tendencia de la cartera de crédito de vivienda, donde los préstamos para la adquisición de vivienda en Barranquilla mantienen una tendencia creciente, presentando un pico a junio-julio de 2021. Con corte de septiembre de 2021, de acuerdo con informes de la Superfinanciera, se encontró que la cartera de vivienda sumó $3,9 billones, desembolsando así 3.958 créditos de vivienda en el Atlántico.
Durante los últimos dos años se vendieron 1.839 viviendas tipo VIP, 9 de cada 10 fueron lanzamientos que corresponden al plan parcial en la zona urbanizada Caribe Verde, ubicada cerca de la avenida Circunvalar. En total, para este periodo en el área metropolitana de Barranquilla se vendieron 3.696 viviendas de interés prioritario, en donde la capital del Atlántico posee el 50 % del mercado, seguido de Soledad con un 36 %.

Por su parte, las ventas de VIS aumentaron a 4.880 durante el 2021, siendo la más alta de los últimos tres años. Cerca del 62 % de estas ventas corresponden a proyectos desarrollados durante el 2020 y 2021.

El sueño de tener casa propia

Muchos jóvenes a los 25 años sueñan con viajar o vivir nuevas experiencias. A diferencia de muchos, pocos son los que ponen los pies en la tierra y construyen sus sueños. Este es el caso de Yaleinis Utria, una mujer que a su corta edad ha trabajado por obtener sus metas y una de ellas es la de tener casa propia.

“Vivía en una casa familiar, compartida con mis padres, tíos y primos. Siempre soñaba con un espacio el cual podría adecuar a mi gusto y vivir más cómodamente”, manifiesta Utria.

Esta joven aplicó al subsidio de la casa de compensación en 2019 donde salió beneficiada, posteriormente solicitó el crédito bancario y se vinculó al programa de Mi Casa Ya, a través de la constructora que le recibió los documentos.

“Apliqué en 2019 y la entrega del apartamento estaba programada para noviembre de 2021. Con un ahorro de cesantías y 19 cuotas de $180.000 pude completar la cuota inicial de $8 millones”, explica la hoy propietaria de un apartamento ubicado en el sector de Alameda del Río.

“Nunca he ganado más de dos salarios mínimos. Pude lograr este sueño con mis ahorros y una muy buena organización. Hoy lo estoy remodelando con ayuda de mi padre, quien es maestro de obra y está realizando los trabajos”, agrega Utria, concluyendo que lo que hace unos años era un sueño hoy es una realidad para muchos.

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